Les presento por esta vía a a esta nueva amiga del consultorio de Domínico. Aparece todas las noches en la ventana, así como la vemos.
Parece que el bicherío del barrio se concentra para alimentarla y de paso los chicos y el pediatra nos divertimos viéndola.Divierte , decora y mata bichos, todo de manera ecológica y gratuita.
Hay antecedentes.
Ocurrió hace muchos años al llegar al consultorio. En esa época abría yo el lugar , junto con Milka, la secretaria de esa primera época. Al entrar me dirigí al toilette, todavía cerrado con llave desde el día previo.
Cuando fui a utilizar el inodoro, urgido por el largo viaje ( en ese entonces desde Luján) encuentro una "sorpresa" flotando .
No exactamente de esas desagradables sorpresas que es esperable encontrar flotando en un inodoro sino una de otra índole.Muy quietecito , un sapo. Lo creí muerto hasta que me acerqué y comenzó a nadar en círculos.
Misterio. ¿Cómo cuernos hace un sapo para aparecer dentro del inodoro de un baño cerrado?
¿Tiene la capacidad de nadar contracorriente a través del sifón hasta llegar ahí?
¿no tenía miedo de la contaminación pediátrica?
¿se creía Nemo?
¿La versión escatológica discreta del monstruo del lago Ness?
Opté por rescatar al animalejo verde, y llevarlo en simpática cajita al jardín de mi suegra donde pasó a morar bajo el nombre de Pediatriquito. Reaparecía ante cada lluvia hasta que decidió llamarse a retiro y no se lo vio más.
Quedó el recuerdo y el mito.Quizás también el sueño cumplido del inodoro de , por una vez , haber servido para otra cosa.
el vuelo del sapo,Gustavo roldan, genio del libro infantil recientemente fallecido, aprovecho para recordarlo .
los sueños del sapo,javier villafañe, en cuento para los derechos del niño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario