ASQUEROSOLOGÍAS VARIAS
Hay que reconocerlo. Nuestras criaturitas aman lo asqueroso.
Desde que nacen los llenamos de peluches angelicales, rosas , celestes o blanquitos según el caso. Les limpiamos la cola amorosamente, dejándola brillante, y como si fuera poco le cubrimos las imperfecciones con inmaculados hipogloses. Con tules, repelentes, insecticidios, toallitas antisépticas, desodorantes ambientales o corporales intentamos aislarlos del lado desagradable del mundo. A veces hasta les impedimos el rock con algún inefable Baby Mozart o una Gabriela u otros empalagamientos.
Pero nuestros hijos son nuestro reflejo, y no todo lo que nos dice el espejo necesariamente nos gusta.
El que no tenga alguna íntima asquerosidad placentera en el placard, que arroje la primera piedra o se vaya a leer el blog de algún otro Socolinski.
En fin, a todos nos gusta que lean, que quieran aprender cosas, que se diviertan soberanamente. De paso conocen cuestiones de su cuerpo, su mundo y naturalizan cuestiones que ya eran naturales.
Hay unas cuantas variantes , desde la cocina a los animales, de la cabeza a las tripas, y una propuesta de actividades asquerosas para padres y niños.
Además los dibujos son buenísimos.
EN FIN, UN ASCO
No hay comentarios:
Publicar un comentario