Anecdota triste

LAS ELECCIONES Y LA TRISTEZA

En época de elecciones llegan los discursos. Que en líneas generales no cambian. Escuchando discursos políticos, todos con la saludable intención de ganar elecciones, me llega un recuerdo triste, que quiero compartir.

Cuando comienzo a escribir esto, no recuerdo la fecha exacta. Ya la googlearé antes de terminar y la aclararemos. Fue el año y el día  en que asumió el presidente riojano. Por el contenido del discurso, pudo haber sido cualquier otro, pero contrastando lo que habló y lo que fue pasando luego, la tristeza se multiplica.

Era en Casa Cuna, en una guardia de fin de semana. Día feriado, en que como dije, Carlitos asumía. Yo era residente a cargo de una sala de internación .Casi al comienzo de la guardia nos avisó la enfermera que había  un pacientito con una emergencia. Era un bebé de varios meses, muy desnutrido, a quien conocía de días previos. De una familia muy pobre, a quien su mamá muy joven y muy mal asesorada  había alimentado con leche de vaca diluida al medio con te de paico.

Esta anécdota no es una historia sino el recuerdo de un momento jodido. El chico en paro cardíaco,  del que por suerte se recuperaría  un ratito después, para llegar en aceptable condición a la terapia intensiva. Vuelvo al momento en cuestión: el bebé en paro cardíaco, los médicos residentes reanimándolo con mucho más ímpetu y amor que ciencia. Y en los televisores de la sala, primero el himno nacional y luego el discurso de asunción del hombre que nos declararía en el primer mundo por decreto. La sensación de oír que seríamos depositados en pleno desarrollo, viviríamos la revolución productiva mientras uno tiene entre pulgares  e índices a un chico sin músculo suficiente por falta de alimento y de oportunidades.

A veces los discursos vacíos están llenos de  porquería.

para imaginar la banda de sonido...http://www.retoricas.com/2010/05/discurso-carlos-menem-asuncion.html

va video..http://www.youtube.com/watch?v=CPkrkvV30Kc&feature=player_detailpage